La relación de las organizaciones de trabajadores/as con los gobiernos de turno nunca ha sido cosa fácil. Matices más o matices menos, al final para los/as trabajadores/as la respuesta suele ser “no” o un tímido “si”, pero muy alejado de lo que se nos ha dicho e incluso prometido. Es una mala práctica del estado chileno esta de la mezquindad y los mínimos, con la cual debemos lidiar, nos guste o no, ya que cuando la economía está comprimida, esa es la razón (“es que no hay recursos”, se nos dice) y cuando no lo está, tampoco es cuando, porque como las cosas están bien, podemos echarlas a perder. O sea, el “No” vino para quedarse, cuando de trabajadores/as se trata, porque a algunos/as siempre se les dice que “si”, no necesariamente con criterios de justicia o equidad.
La verdad es que CONFEDEPRUS va ganando desesperanza aprendida con las autoridades actuales. Jamás se ha dejado de lado el respeto, pero revisando los resultados, claramente no tenemos nada para decir que debiéramos abstenernos de presionar.
Queremos conseguir “la instalación de una mesa de negociación sectorial que permita avanzar en nuestra plataforma reivindicativa priorizando nuestra Carrera Funcionaria, mejoras en las remuneraciones …. y garantías de condiciones laborales centradas en acceso de cuidados infantiles, salud funcionaria, incentivo al retiro permanente, ambientes libres de violencia, seguridad laboral, salud funcionaria, implementación reducción jornada laboral, regulación del trabajo pesado y fiscalización de buenas prácticas laborales” (de las conclusiones de la asamblea nacional 5 de septiembre).
Además “rechazamos la decisión del Ministerio de Salud de mantener solo 6.070 personas asociadas a contrataciones COVID hasta diciembre 2023 y poner fin a la prestación de servicios de aproximadamente 6300 trabajadores y trabajadoras, quienes hoy cubren una brecha histórica de personal en nuestros establecimientos, sin considerar el impacto sanitario de esta decisión, con graves consecuencias para el equipo de salud en cuanto a sobrecarga laboral y en garantías de continuidad de atención para la población ante la falta de personal. Refrendamos nuestra demanda de la regularización del 100% del personal a honorarios de nuestros establecimientos, con reflejo en el presupuesto 2024” (ídem fuente anterior).
Todas estas razones nos han llevado a concluir que el 12 y 13 de septiembre hagamos presión a las autoridades desde nuestros lugares de trabajo, asegurando los turnos éticos que permitan limitar al máximo el daño a la población y por supuesto, dialogar con autoridades, con la prensa, las redes sociales, explicando lo que nos está pasando, generando conciencia y apoyo a nuestro movimiento para logar algún avance.
Esperamos un balance positivo al final de la jornada y durante ella, sumar muchas voluntades, no solo de CONFEDEPRUS, sino de todos quienes bajo distintas formas, impulsamos estas mismas causas utilizando diferentes métodos.
Vamos por mas…
JVM